jueves, 23 de mayo de 2019

La nueva definición del kilogramo

Esto del Sistema Internacional de unidades (SI) casi siempre es un pequeño martirio para los estudiantes, que no acaban de entender por qué y para qué hay que manejarlo.

El caso es que hay unidades cuyo patrón de referencia todavía es un objeto físico. Aunque hace años ya se redifinió el metro, evitando la barra con dos marcas que indicaban la longitud del metro (que cambiaba si lo hacía la temperatura, por ejemplo), todavía queda el kilogramo. Pero en la Conferencia General de Pesas y Medidas, celebrada en noviembre de 2018, después de estar en vigor 129 años se ha decidido cambiar la definición del kilogramo, que pasa a depender de  la constante de Planck.

Y no es la única unidad que cambia: también lo hacen el kelvin (que dependerá de la constante de Boltzmann), el amperio (de la carga del electrón) y el mol (de la constante de Avogadro).



Las nuevas definiciones han entrado en vigor el 20 de mayo de 2019, como se recoge en el siguiente artículo de ABC. Eso sí, la diferencia es tan pequeña que no va a tener ninguna influencia en nuestra vida diaria, aunque sí desde el punto de vista científico.