El ahorro energético es fundamental hoy por hoy, y es algo que tenemos la obligación de transmitir en nuestro trabajo. Porque es innegable que el estado de stand by es innecesario, ya que no hay aparatos en funcionamiento, y solamente facilita conectarlos o desconectarlos de forma inmediata. Eso sí, necesitamos datos concretos que permitan justificar que tengamos que estar pendientes todo el día apagando aparatos y regletas de conexión.
El vídeo que puedes ver aquí ha aparecido en el Heraldo de Aragón digital el 13 de junio. Destila buena intención por todos lados, pero ... aporta datos cuando menos discutibles.
Lo más llamativo: que el 10% de la factura eléctrica proviene de aparatos en stand by. Eso viene a ser consumir del orden de unos 20 kWh al mes, que es una cantidad nada despreciable. Suponiendo que en una casa haya cinco aparatos en stand by durante 24 horas al día (TV, router, bluray, equipo de música, etc), cada uno debería tener una potencia de unos 5,5 W en stand by.
Si hacemos caso al dato que aporta de que una televisión grande tiene una potencia de 10 W en stand by, la cosa está clara. Pero como soy un poco quisquilla, me he tomado la molestia de mirar el dato de mi TV, una LG de 43 pulgadas con todas las cuchuflitadas que llevan ahora (smart tv, wifi, UHD, etc). Y resulta que tiene 36 W en funcionamiento y 0,3 W en stand by. Vamos, nada que ver con lo que se dice en el vídeo.
En mi casa conecto por la mañana las dos regletas que tengo y las apago por la noche. No me rompo la cabeza. Eso sí, he cambiado las bombillas y focos halógenos por lámparas led. ¡Y ahi el ahorro sí que es muy importante!
Resumiendo: hay que conocer el problema y aplicar el sentido común para buscar la mejor solución. Como siempre.