Las posibilidades de los teléfonos móviles son cada vez más espectaculares. ¡Hay que ver lo fácil que resulta grabar vídeos a cámara lenta!
Dos ejemplos: la típica experiencia de una lata que se chafa por acción de la presión atmosférica al condensarse el vapor de agua y disminuir la presión interior, y la caída libre de una envoltura de magdalena, que después de cabecear un poco va cayendo a velocidad constante (¡esta experiencia es menos típica!).