En realidad, es un chico el que va en el monopatín, pero no se fija en la manguera que está extrayendo agua, el monopatín choca contra ella y la desplaza un poco hasta que se detiene, pero el chico mantiene su velocidad (¡la inercia!) y sale volando hasta estamparse contra el suelo.
¡Si es que los principios físicos se cumplen quieras o no!